Te dejo justo aquí lo que soy

Me gusta de vez en cuando levantarme y abrir de par en par la puerta de la habitación, dejar que entre la luz que se cuela de fuera.

Quitarme quien soy y dejarlo, ahí, en el suelo, justo al lado de la cama, para que se tropiece el que frecuenta...

Entre mis cosas dejo mi mirada interrogante, mi característico gesto de levantar una sola ceja, mis contínuas ganas, mi ridícula manía de hacer estupideces, como morder el queso para que se quede la silueta de mis dientes, y lo que es peor, con ello, partirme de la risa, mi facilidad por el chispazo, y por crear tormentas, mi capacidad de generar dudas, mi costumbre de detenerte com mi cadera a medio camino...

Quedan formando un montón mi melancolía, mi estrés, mi precipitación, mi mania de retorcer palabras, mis contínuos cambios de planes... Y sobretodo, mi estado de mosquito con alas mojadas que no para de dar vueltas en círculos....

Quitarme y renacer, con una promesa, la de volver, porque esto que me quito, soy consciente de que es lo que me hace feliz.